Una obligación urgente; el canal anónimo de denuncias en la UPF

AGHM

La Universidad Pompeu Fabra ha creado la «Línea Ética» como canal de denuncias interactivo que garantiza no sólo la confidencialidad, sino también el anonimato de los denunciantes. El Código Ético incluyó dos nuevos instrumentos de garantía: la creación de la Comisión de Integridad y la adopción de un buzón electrónico interactivo y anónimo.

PERE TORRA


Código ético UPF

La Universitat Pompeu Fabra de Barcelona (UPF) ha apostado decididamente por implementar un canal de denuncias en el marco del impulso estratégico que ha llevado a cabo dentro de su política de integridad. En el año 2017 el Consejo de Dirección de la UPF aprobó la «Estrategia de Transparencia, Integridad y Cumplimiento» («Proyecto ETIC»), con la que se dio cobertura a diversas actuaciones de promoción y mejora de la integridad.

Por su parte, la Unión Europea aprobó la Directiva (UE) 2019/1937 del Parlamento europeo y del Consejo de 23 de octubre de 2019 relativa a la protección de las personas que informen sobre infracciones del Derecho de la Unión (conocida como Directiva whistleblowing). Todo ello confluyó en la revisión del Código Ético de la UPF, el cual fue aprobado en fecha 8 de julio de 2020, a partir del trabajo de una comisión representativa creada a ad hoc y tras un proceso participativo abierto a toda la comunidad universitaria.

Entre otros aspectos, el Código Ético incluyó dos nuevos instrumentos de garantía: la creación de la Comisión de Integridad y la adopción de un buzón electrónico interactivo y anónimo, es decir, el canal de denuncias, que se denomina «Línea Ética de la UPF».

La UPF se adhirió al Protocolo marco de colaboración entre el Ayuntamiento de Barcelona y el Instituto para la Cultura Democrática en la Era Digital (Xnet), con el cual nuestra Universidad se situó en el nivel de exigencia más elevado entre las instituciones comprometidas en la integridad pública.

A pesar de que la Directiva mencionada lleva ya un año de retraso en su trasposición en el Estado español (debería haberse efectuado en diciembre de 2021), la UPF procedió a adoptar el marco normativo necesario bajo el amparo de la normativa europea. Por ello, el Consejo de Gobierno de la UPF aprobó dos reglamentos propios: uno sobre la Comisión de Integridad, constituida como la instancia responsable de la supervisión del canal de denuncias, y otro sobre la Línea Ética.

Compromiso integridad pública

En cuanto a requerimientos tecnológicos, nuestros servicios informáticos instalaron un software específico de código abierto proporcionado por la empresa GlobaLeaks. Asimismo, la UPF se adhirió al Protocolo marco de colaboración entre el Ayuntamiento de Barcelona y el Instituto para la Cultura Democrática en la Era Digital (Xnet), con el cual nuestra Universidad se situó en el nivel de exigencia más elevado entre las instituciones comprometidas en la integridad pública.

Con todo ello, el 8 de julio del 2021 (un año después de la aprobación del Código Ético), pusimos en marcha la Línea Ética, como canal de denuncias interactivo que garantiza no sólo la confidencialidad sino también el anonimato de los denunciantes, lo cual constituye el máximo nivel de protección.

La UPF ha creado la Línea Ética como canal de denuncias interactivo que garantiza no sólo la confidencialidad, sino también el anonimato de los denunciantes

En un año de funcionamiento la Línea Ética de la UPF ha recibido una treintena de denuncias o comunicaciones sobre diversos temas (docencia, idiomas de aprendizaje, derechos laborales, selección de personal, transparencia, conflictos personales, religión, entre otros).

Ejemplos reales

En cuanto a ejemplos reales podemos señalar los siguientes: la comunicación de un profesor que denunció recibir insultos en los cuestionarios anónimos de la evaluación docente que rellenan los estudiantes; el conflicto entre dos profesores que compartían despacho y, a causa de las restricciones por la pandemia, uno de ellos molestaba al otro cuando llevaba a cabo una clase por videoconferencia; o la denuncia de un contratado en el marco de un proyecto de investigación que no tenía suficiente información sobre el alcance de sus derechos como trabajador.

En todos estos casos, la Comisión de Integridad adoptó acuerdos que contribuyeron no solamente a la resolución de los problemas planteados, sino también a la mejora de la institución en su conjunto.

la implantación de la Línea Ética en la UPF ha sido exitosa y cuenta con unas fases bien resueltas técnica, jurídica y organizativamente

El balance del funcionamiento del primer año del canal es muy favorable y, entre sus fortalezas, cabe destacar, en primer lugar, que la implantación de la Línea Ética ha sido exitosa y cuenta con unas fases bien resueltas técnica, jurídica y organizativamente.

Por otra parte, cabe mencionar el correcto funcionamiento del anonimato (a pesar de que se hayan recibido algunos improperios aislados, que no empañan el interés del proyecto, ya que simplemente hay que desecharlos).

Además, con el nuevo canal se abren buenas perspectivas de impacto para la mejora institucional de la UPF, más allá de su carácter de canal obligatorio (toma de conciencia, mejora de procedimientos…).

En cuanto a las debilidades, debe señalarse la insuficiencia de las acciones de difusión (y de conocimiento) del nuevo canal y la necesidad de diferenciarlo de otros canales de comunicación con la UPF ya existentes

Debilidades

En cuanto a las debilidades, debe señalarse la insuficiencia de las acciones de difusión (y de conocimiento) del nuevo canal y la necesidad de diferenciarlo de otros canales de comunicación con la UPF ya existentes.

También debe tenerse en cuenta que las comprobaciones de los hechos exigen un trabajo de gran laboriosidad. Además, quizás por su novedad, la redacción de los acuerdos de la Comisión de Integridad reviste una gran complejidad.

En último término, cabe añadir también que hay una notable falta de claridad o de aportación de evidencias de calidad por parte de los alertadores o denunciantes, lo cual en algunos casos puede dificultar que la denuncia tenga su recorrido.

La apuesta de la UPF por el desarrollo de la Línea Ética, la primera universidad del Estado español en llevarlo a cabo, se ha erigido en una pieza clave de la política de integridad institucional y demuestra el compromiso con la transparencia, la democracia y los derechos fundamentales .


PERE TORRA es Secretario General de la Universidad Pompeu Fabra

Twitter @ptorra

@UPFBarcelona

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