Nuevo rumbo a la Formación Profesional

La Ley Orgánica 3/2022 integra la oferta de formación profesional en un único sistema de formación profesional que, bajo el principio del aprendizaje a lo largo de la vida, se ordena en cinco grados ascendentes para dar respuesta a las necesidades de cualificación de las personas, así como el ajuste entre la oferta y la demanda laboral.

MIGUEL ÁNGEL PINERO GORDO


Necesidad de un cambio de rumbo

Con la publicación de la nueva Ley Orgánica 3/2022, de 31 de marzo, se inicia un cambio de rumbo en la formación profesional que afecta, como su título indica, a su ordenación e integración.

Esta norma viene a sustituir a la antigua Ley de Cualificaciones, y su propósito es, entre otros, aunar los antiguos subsistemas de formación profesional del sistema educativo y de formación profesional para el empleo en un sistema único. La antigua división en dos subsistemas destinados a diferentes colectivos, sin relación entre ellos, era una fuente de limitaciones importantes en la cualificación y recualificación profesional en España

Además, este proceso de transformación se ha iniciado para dar respuesta a las recomendaciones que el Consejo de la Unión Europea realizó a los Estados Miembros el 24 de noviembre de 2020, en relación a la competitividad sostenible, la equidad social y la resiliencia, y en el que les instaba a “trabajar en la aplicación de una política en materia de Educación y Formación Profesional que dote a los jóvenes y adultos de los conocimientos, las capacidades y las competencias necesarias para prosperar en un mercado laboral y una sociedad en evolución, y para gestionar la recuperación y la doble transición justa hacia la economía ecológica y digital en tiempos de cambio demográfico y a través de todos los ciclos de la economía”.

España ya era consciente de la necesidad de este cambio y, así quedaba reflejado en el Plan de Modernización de la Formación Profesional (julio 2020), donde una vez realizado un análisis de la situación formativa y laboral, así como de la formación profesional de nuestro país, planteaba como misión la de “crear un ecosistema de relanzamiento económico desde la apuesta por el capital humano y el talento”.

En el mismo Preámbulo de la nueva ley se señala que nuestro sistema de formación profesional no estaba dando respuesta al desajuste entre la oferta y la demanda laboral.

Desde la perspectiva de los trabajadores, muchas personas no disponen de las capacidades y competencias para aprovechar las oportunidades de empleo que ofrece el cambio económico y tecnológico. Por el contrario, otras muchas sí que las poseían por haberlas adquirido a través de la experiencia laboral pero no tenían forma de reconocerlas y certificarlas.

Desde la perspectiva del sistema empresarial, éste no logra cubrir muchas de sus ofertas de empleo, especialmente en los niveles intermedios de cualificación, y en concreto en aquellas actividades directamente relacionadas con la modernización del sistema económico exigida por el cambio tecnológico y la nueva economía, además de una débil productividad media de nuestra economía y una insuficiente capacidad de emprendimiento.

Es necesario fortalecer el grupo de profesionales con cualificación intermedia.

Una de las principales causas es que nuestra estructura formativa está sesgada en ambos extremos, ocasionando que tengamos un elevado número de personas sobrecualificadas en relación con el trabajo que desarrollan. Por ello, es necesario fortalecer el grupo de profesionales con cualificación intermedia.

El nuevo sistema de formación profesional

Para ello, esta ley responde a los diferentes compromisos asumidos por España tanto a nivel estatal como europeo bajo una premisa:

Poner en el centro a la PERSONA y su necesidad de cualificarse y mantenerse actualizada a lo largo de toda su vida”.

El primer paso ya se dio en el año 2020 cuando, en un mismo Ministerio, se asumió la propuesta y ejecución de la política del Gobierno en materia de formación profesional del sistema educativo y para el empleo, quedando configurado el actual Ministerio de Educación y Formación Profesional.

Y en este momento, con esta ley, se asientan las bases del nuevo sistema de formación profesional cuyas características principales son:

ÚNICO: Bajo un único sistema de formación profesional, antes dividido en dos subsistemas, se recogen todas las actuaciones dirigidas a identificar las competencias profesionales del mercado laboral, las ofertas de formación, el reconocimiento de competencias profesionales, así como el servicio de orientación y acompañamiento profesional. 

Este sistema se concreta en los siguientes elementos integrantes:

  • Elementos básicos de los currículos: La nueva ley establece que todo currículo de formación profesional debe incorporar, entre otros, diversos contenidos culturales, científicos, tecnológicos y organizativos, así como contenidos vinculados con la digitalización, la sostenibilidad, la innovación, el emprendimiento, etc.
  • Catálogo Nacional de Estándares de Competencias Profesionales: En el que se ordenan los estándares de competencias profesionales (antes llamados unidades de competencia) identificados en el sistema productivo. El cambio de terminología se debe a la necesidad de alinearse con el significado que tiene en los países de la Unión Europea evitando errores interpretativos. 
  • Catálogo Modular de Formación Profesional: En el que se ordenan los módulos profesionales asociados a cada uno de los estándares de competencias profesionales.
  • Catálogo Nacional de Ofertas de Formación Profesional: En el que se incorporan todas las ofertas de formación profesional reconocidas y acreditables en el marco del sistema.

VERTICAL: Se ordena un sistema en el que toda la formación sea acreditable, acumulable y capitalizable, mediante itinerarios formativos flexibles y facilitadores de la progresión en la formación, y que se encuentra estructurado en una doble escala:

Cinco Grados ascendentes (A, B, C, D y E): Que describen las ofertas formativas organizadas en unidades diseñadas según el Catálogo Nacional de Estándares de Competencia Profesionales.

Tres niveles de competencia profesional (1, 2 y 3), conforme a lo establecido en el Catálogo Nacional de Estándares de Competencia Profesional.

DUAL: En tanto que los procesos formativos se realizarán entre los centros de formación profesional y las empresas u otros organismos equiparados, siendo obligatoria para los grados C y D, y optativa para los A, B y E. Se establece, así mismo, que la fase de formación en la empresa tendrá una duración mínima del 25% de la duración total prevista de la formación, que quedará recogida en el denominado “plan de formación”, bajo la supervisión y coordinación de un tutor/a dual del centro de formación profesional y un tutor/a dual de empresa u organismo equiparado, y bajo uno de los dos regímenes de oferta, general o intensiva.

Un compromiso para todos

Este ambicioso proyecto supone un cambio de rumbo en la formación profesional y para que, se llegue a “buen puerto”, no solo es necesario del compromiso de todas las administraciones implicadas, sino que además va a requerir una importante inversión económica para garantizar su éxito y que no quede en una mera declaración de intenciones y compromisos.

El buen fin de un Sistema de Formación Profesional eficaz exige una estrecha alianza, cooperación y confianza entre tres actores: administraciones, centros y profesorado, empresas y familias

Preámbulo. ley orgánica 3/2022

Afortunadamente, disponemos de un importante respaldo económico a través de una parte de los fondos europeos “Next Generation EU”.

Sin embargo, y como se apunta en el Preámbulo de esta ley “El buen fin de un Sistema de Formación Profesional eficaz exige una estrecha alianza, cooperación y confianza entre tres actores: administraciones, centros y profesorado, empresas y familias”. 

Así pues, es el momento de que centros, profesores, empresas y familias, confiemos y demos un respaldo a las administraciones en su apuesta por la formación profesional.


Miguel Ángel Pinero Gordo. Inspector Central de Educación del Ministerio de Educación y Formación Profesional.

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