«Barómetro universidad sociedad» de la UCM

Lavapies Madrid. AGHM

El Barómetro Universidad-Sociedad está elaborado por el Consejo Social de la Universidad Complutense de Madrid y tiene como objetivos recoger, y analizar, el estado de opinión de los estudiantes universitarios sobre grandes temas de actualidad.

MARÍA CONCEPCIÓN GARCÍA GÓMEZ


La pandemia del Covid-19

El Consejo Social de la Universidad Complutense de Madrid ha recuperado la elaboración de su tradicional Barómetro Universidad y Sociedad. La pandemia del Covid-19 impactó de manera brusca y prolongada en todos los aspectos de la sociedad y era muy importante conocer, con datos, la repercusión que esta terrible circunstancia ha tenido en los estudiantes de nuestra Universidad, especialmente en sus expectativas sobre el presente y el futuro de la formación y el empleo.

Este Barómetro recoge los resultados de las encuestas realizadas a más de mil estudiantes de nuestra Universidad durante el mes de mayo de 2021, sobre aspectos tan variados como la movilidad laboral, la inserción laboral de personas con discapacidad, expectativas sobre su futuro, tanto educativo como laboral, la sanidad, las pensiones… En este momento nos vamos a detener sobre los resultados de tres aspectos que nos resultan especialmente interesantes: Expectativas y Futuro, Convivencia y Valores y Crisis Económica y Cambio Social.

Respecto al futuro de su carrera profesional, sorprende que algo más del 46% de los encuestados piensen en trabajar en la función pública, el dato más elevado con diferencia de la serie histórica del barómetro. Por encima o muy cerca del 50% se encuentra en las áreas de Humanidades (51,8%), Ciencias de la Salud (54,2%) y Ciencias Sociales y Jurídicas (49,8%). Únicamente en el área de Ciencias Experimentales, trabajar en empresa privada es la respuesta mayoritaria, con un 44,3% frente al 29,4% de futuro profesional en la función pública.

sorprende que algo más del 46% de los encuestados piensen en trabajar en la función pública, el dato más elevado con diferencia de la serie histórica del barómetro

La crisis económica y de empleo, la violencia de género, el acceso a la vivienda y la crisis sanitaria

Es evidente que la situación provocada por la pandemia en el sector privado ha podido influir de manera muy significativa en este cambio de tendencia. Si bien y aunque pueda parecer contradictorio, hay que destacar que entre el 2015 y el 2021, se ha elevado la intención de trabajar como trabajador autónomo, de un 5,2% a un 8,7%. Podríamos explicarlo por una mayor difusión del comportamiento emprendedor, así como por un cambio cultural ente los jóvenes, que pueden valorar su libertad para tomar decisiones y ser su propio jefe más que la seguridad de un empleo por cuenta ajena.

En cuanto a sus principales preocupaciones, más del 50% de los encuestados destacan, por este orden, la crisis económica y de empleo, la violencia de género, el acceso a la vivienda y la crisis sanitaria (recordamos que las encuestas se realizaron después de los momentos más duros de la pandemia).

En el apartado de Convivencia y Valores, llama la atención, en una primera visión, la percepción negativa que tienen nuestros estudiantes sobre el clima social en España, ya que las respuestas sobre cómo está evolucionando España en los diferentes indicadores es, en todos ellos, “mal” en más del 50%, llegando en algunos a más del 80%: la confianza en las instituciones (56,2%), la imagen de España en el exterior (53,3%), la situación de las familias (69,3%), el clima de convivencia (67%) y la calidad de vida (84,1%).

llama la atención, en una primera visión, la percepción negativa que tienen nuestros estudiantes sobre el clima social en España

La libertad, la honestidad y la amistad

A pesar de estos resultados pesimistas, la comparación con la serie histórica de barómetros nos indica una notable mejoría en los cinco, es decir, podríamos entender que son menos pesimistas que sus compañeros del 2012. En algunos casos, la mejora ha sido bastante importante, llegando a cuadruplicar la valoración positiva en 2021 frente a la del 2012. En todo caso, hay mucho trabajo por hacer por parte de todas las instituciones para que nuestros universitarios sean más positivos en cuestiones socialmente tan relevantes.

Respecto a la importancia que conceden en su vida a ciertos valores, destacan en las tres primeras posiciones la libertad, la honestidad y la amistad, seguidos de la solidaridad, la familia, la lealtad, la responsabilidad, la independencia y la fidelidad. Únicamente no supera la nota de 5 la religión, que se sitúa en un 3%.

Finalmente, el apartado de Crisis Económica y Cambio Social está reflejando la revalorización de lo público durante la pandemia, especialmente lo relativo a educación y sanidad. Así, el 90% de los estudiantes encuestados considera que habrá un sistema de educación público, frente al 74,6% del 2015, siendo el caso de la sanidad aún más llamativo: en 2016, cerca de un 70% de los estudiantes encuestados opinaban que el futuro de la sanidad sería fundamentalmente privado, mientras que en el barómetro del 2021 esta cifra apenas supera el 34%. Sin duda, estos datos están mostrando una valoración positiva de los jóvenes a la respuesta rápida y eficaz de los servicios públicos ante la pandemia.

en 2016, cerca de un 70% de los estudiantes encuestados opinaban que el futuro de la sanidad sería fundamentalmente privado, mientras que en el barómetro del 2021 esta cifra apenas supera el 34%

Mayor confianza en lo público

Esta mayor confianza en lo público se refleja también en el caso de las pensiones, donde por primera vez desde 2012 se supera el 50% en que se mantendrá el sistema público de pensiones, dato que en 2015 era de apenas un 33%, si bien esto va unido a la creencia de que aumentará la edad de jubilación, como consideran el 87,1%. 

Por otra parte, un 81,5% opina que viviremos más en alquiler, lo que implica una fuerte subida respecto al poco más del 68% que pensaba así en 2015. Esta circunstancia, además de por la crisis producida por la pandemia y la incertidumbre de futuro, puede estar mostrando un cambio en los hábitos y forma de vida de los jóvenes. 

Para terminar, los datos reflejan que aún no hay una repercusión de la crisis económica en la economía de los estudiantes. Así, tan solo una cuarta parte de ellos han visto reducida la ayuda familiar que reciben, frente a más de la mitad que lo sufrieron en 2015.

Y esta circunstancia se refleja en la menor adopción de medidas de ahorro entre los jóvenes, con diferencias muy significativas respecto al último barómetro de 2015. La única variable que ha aumentado del 30,2% en 2015 al 42,3% en 2021 es “sales menos de copas y haces más botellón”, lo que puede explicarse más por los cierres y restricciones en los locales de ocio nocturno que por medida de ahorro, si lo comparamos con las respuestas a los demás indicadores, que no solo no muestran una preocupación por el ahorro, sino más bien al contrario. 


MARÍA CONCEPCIÓN GARCÍA GÓMEZ Vicerrectora de Empleabilidad y Emprendimiento en Universidad Complutense de Madrid.

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