«Los procesos de alineación de la Formación Profesional de Grado Superior y la Universidad serán fundamentales en la construcción de un sistema educativo que capacite a las personas para afrontar los retos sociales, económicos y culturales de unas sociedades caracterizadas por el cambio, llenas de incertidumbre ante el impacto tecnológico, medioambiental y ético que no deja de advertirnos.«
Pedro Badía es actualmente el Director de la Fundación ASPASIA, una entidad que tiene como objetivo poner en valor la formación profesional para el empleo, generar conocimiento e innovación en estas materias y promover la calidad y la equidad del sistema educativo. La Fundación ASPASIA colabora con la Universidad de Castilla-La Mancha, con la que ha creado el Aula Fundación ASPASIA Formación para el Empleo UCLM, y con la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, con la que organiza encuentros sobre la transición digital y el empleo.
Pedro Badia ha sido y es un referente para todos los que creemos en la educación pública, gratuita, laica y de calidad. Una persona que ha dedicado su vida a luchar por los derechos de los docentes, de los estudiantes, de las familias y de la sociedad en general.
Desde sus inicios como docente en la escuela rural y su responsabilidad como presidente de la Federación de Enseñanza de CCOO, Pedro Badía ha demostrado una coherencia y una constancia admirables, participando activamente en los movimientos sociales y pedagógicos que han impulsado la renovación y la mejora de la educación en nuestro país. Siempre ha defendido la escuela pública como un espacio de igualdad, de diversidad, de democracia y de ciudadanía, reivindicando la dignidad y la profesionalidad de los trabajadores y trabajadoras de la enseñanza. También ha colaborado con otras organizaciones e instituciones en la construcción de un sistema educativo inclusivo, equitativo y de calidad, negociando y acordando con las administraciones públicas y con los agentes sociales las medidas necesarias para garantizar el derecho a la educación de todos y todas.
Desde tu conocimiento de la FP ¿Nos puedes contar cómo ha cambiado la FP en estos años?
Desde la LOGSE hasta la actualidad, un periodo que empieza hacia 1990 la gran preocupación de los distintos gobiernos ha sido la urgente dignificación de la FP y su necesario acercamiento a la sociedad en general, y al mercado de trabajo en particular.
Creo que las distintas leyes orgánicas de Educación, que se han ido sucediendo, con sus correspondientes reales decretos, han supuesto un avance progresivo hacia la dignificación y la visibilización de la FP; así como de la necesidad para nuestra sociedad, las empresas y el mercado laboral de contar con técnicos y técnicas bien formados y capaces de afrontar los retos de aprendizajes y tareas que les ha venido exigiendo en cada momento el mercado laboral y el sistema productivo. Creo que el momento más importante del proceso que se inicia en la década de los noventa es la publicación de la Ley Orgánica de Formación Profesional (LOIFP) de 2022 que tiene un enfoque global, integrando los diferentes subsistemas de la FP. Esta ley ordena la FP como un sistema único e integrado fundamentado en tres elementos: la oferta de formación, la acreditación de competencias profesionales y la orientación profesional.
En palabras de Clara Sanz secretaria general de FP del MEFPyD, “nos encontramos ante una apuesta estratégica que determinará el futuro de varias generaciones y el bienestar económico del país”. Hablamos de grandes retos, entre otros, acreditar a más de dos millones de trabajadores y trabajadoras; y crear 200.000 nuevas plazas educativas en los próximos cuatro años. Con una inversión, programada, que supera los 5.500 millones de euros. El camino es largo y no exento de dificultades, aun así, en el curso pasado la matricula en la FP ya superó el millón largo de alumnos y alumnas, pero que con un 12%, seguimos estando lejos del 25% de la Unión Europea y del 29% de la OCDE.
Desde la LOGSE hasta la actualidad, la gran preocupación de los distintos gobiernos ha sido la urgente dignificación de la FP y su necesario acercamiento a la sociedad en general, y al mercado de trabajo en particular.
En estos momentos estás al frente de la Fundación ASPASIA ¿Qué nos puedes decir del proyecto?
La Fundación ASPASIA es un proyecto joven, se constituye en 2022. Con un marcado carácter socioeducativo, que patrocina el Grupo ASPASIA. cuya actividad se desarrolla en torno a la Formación Profesional y la Formación para el Empleo. Una marca que en los últimos años ha crecido considerablemente. con una importante implantación territorial en España y en América Latina. Un proyecto muy ilusionante donde hay muchos retos por afrontar y muchos proyectos por desarrollar.
¿Qué fundación queremos? Una que crezca y sea sostenible con proyectos propios. Que sea un referente social y educativo, especialmente para la población joven más vulnerable. Con un modelo de intervención de gran alcance; con voluntad transformadora; que fortalezca y potencie la presencia social desde el trabajo en red. Que sea visible y reconocida, con informes e investigaciones de impacto social; con relaciones estratégicas con medios de comunicación; muy activa en el ámbito digital, web, redes sociales, etc. Una organización profesional única y eficiente, con objetivos ambiciosos, planes definidos, y procesos de trabajos claros, que funcione coordinadamente; con profesionales exigentes y comprometidos; y con recursos de calidad.
Las prioridades que fundamentan nuestro carácter como Entidad ‘sin ánimo de lucro’ y con vocación de ‘interés público’ son: facilitar la participación empresarial en proyectos de mejora social desde el conocimiento, el desarrollo y la actuación en materia de formación, empleo y mercado laboral; contribuir al conocimiento, difusión y cumplimiento de los Derechos Humanos, los Pactos y compromisos, nacionales e internacionales, especialmente en el ámbito sociolaboral donde la empresa adquiere un papel relevante en nuestras sociedades modernas; el desarrollo de programas y proyectos educativos dirigidos a jóvenes en situación de vulnerabilidad, aportando ideas y acciones a la construcción de un sistema de nuevas oportunidades.
¿En qué podríamos acercar las condiciones del profesorado de Formación Profesional de Grado Superior a las del profesorado universitario?
Más que acercar lo que habría que trabajar sería en el establecimiento de un reconocimiento profesional mutuo y un espacio de trabajo compartido y complementario. Las condiciones laborales y profesionales del profesorado de FP de Grado Superior y del profesorado de universidad son diferentes como corresponden a su ubicación en dos sistemas, sujetos a realidades distintas (titulaciones, gobernanza, inversión, planes de estudios, currículos que se imparten, etc.).
Ahora bien, no hay que olvidar que la FP de Grado Superior y la Universidad, comparten, según la normativa española un mismo Espacio de Educación Superior, del cual hablaremos más adelante y que está muy poco desarrollado. Algunas ideas para fortalecer ese espacio de educación superior compartido, y complementario, podrían ser alinear planes de estudios afines de los Grados universitarios y de FP de Grado Superior, para construir itinerarios formativos que permitan desarrollar itinerarios profesionales de calidad, producto del trabajo compartido entre los y las docentes de los dos sistemas; la formación continuada del profesorado de FP debe ser una línea prioritaria y específica para la universidad, no olvidemos que la docencia es un factor de calidad, también en la FP por lo que hay que pensar cómo vamos a formar a las futuras generaciones docentes, que puedan responder al principio de justicia social en la educación; y no menos importante es la investigación, un espacio en la que el profesorado de FP de Grado Superior puede aportar experiencias innovadoras muy interesantes que podrían ser de utilidad a la investigación desarrollada desde la universidad. Tanto cuando hablamos de docencia como cuando hablamos de investigación lo estamos haciendo de un viaje de ida y vuelta que, en último caso, va a desarrollar y a fortalecer ese espacio de educación superior.
¿Qué une y qué separa la educación superior de formación profesional y la universitaria? Creo que la FP de Grado Superior, ha sido gestionada -quizás lo siga siendo en algún sentido- y teniendo unas dependencias, como si fuera una educación secundaria, con una titulación menor y en unas condiciones académicas y formativas inferiores al Bachillerato, por ejemplo, y por supuesto a la universidad. Esta percepción social ha supuesto una importante barrera entre la FP de Grado Superior y los estudios de Grado universitario. Creo que esta idea está prácticamente superada. Hoy las familias entienden que la FP en general, y la FP de Grado Superior en particular, no es una formación menor o de menor calidad que la universitaria.
Tanto cuando hablamos de docencia como cuando hablamos de investigación lo estamos haciendo de un viaje de ida y vuelta que, en último caso, va a desarrollar y a fortalecer ese espacio de educación superior
Por su parte, los y las jóvenes se han percatado del nivel de calidad de estos estudios, además de la inmediatez y el rigor en la adquisición de unos conocimientos que les permiten una rápida inserción en el mercado laboral y la posibilidad de seguir formándose en la universidad. Tenemos que seguir trabajando para que el tránsito del alumnado por el sistema educativo en cualquiera de sus etapas o caminos sea percibido como una continuidad, con coherencia, con gradualidad, que realmente tenga sentido para cada una y cada uno de los adolescentes y jóvenes que en este transitan. No caben análisis sencillos para temas complejos.
¿Qué hacer para terminar de superar estas barreras y construir un escenario compartido? En primer lugar, desarrollar y fortalecer el espacio de educación superior que en España tiene un marco normativo definido por nuestra legislación, y por los organismos internacionales (OCDE, UNESCO, UE), Creo que este alineamiento en el espacio común redundaría en una mayor calidad de las universidades.
Hacer atractiva y fácil el acceso a una titulación de Grado a través de la FP de Grado Superior, trazando un camino permeable de un lado a otro, que sin duda enriquecería el espacio de educación superior; marcando una línea de trabajo conjunta en cuanto a currículos (objetivos, contenidos, metodologías de trabajo, etc.) no olvidemos el impacto que está teniendo las tecnologías y la digitalización en la manera en que se desarrolla el aprendizaje y el impacto en el mercado laboral; colaboración en la docencia y la investigación entre grados universitarios y la FP de Grado Superior, etc. Reconocimiento de estudios cursados entre la universidad y la FP de Grado Superior.
Por otra parte, entender que la FP de Grado Superior es una oportunidad para el crecimiento cuantitativo y cualitativo de la universidad. Las siete universidades privadas de la comunidad de Madrid ya han incorporado a su oferta formativa titulaciones de FP de Grado Superior; mientras que las universidades públicas dan algunos pasos especialmente a través de fundaciones, como es el caso de la Universidad de Málaga. En cualquier caso, en estos momentos, la diferencia es notable entre las acciones que se desarrollan desde la pública y desde la privada, no solo en el reconocimiento de créditos cursados en la FP de Grado Superior, sino también en la oferta formativa.
Tenemos que seguir trabajando para que el tránsito del alumnado por el sistema educativo en cualquiera de sus etapas o caminos sea percibido como una continuidad, con coherencia, con gradualidad, que realmente tenga sentido para cada una y cada uno de los adolescentes y jóvenes que en este transitan
¿Qué relación hay entre la Formación Profesional de grado superior y la formación no reglada para el empleo, como los certificados de profesionalidad o los cursos de especialización?
En el marco de la nueva ley de FP hablaríamos de un sistema único de FP sin hacer distinciones. Un sistema de FP integrado que posibilita una formación a lo largo de la vida. Se empieza con el certificado parcial de competencias, se continúa con el certificado de competencias, sigue el certificado de profesionalidad hasta llegar a los ciclos formativos y los cursos de especialización. El sistema se constituye como un todo con la posibilidad de transitar entre sus distintas partes, acumulando conocimiento y competencias.
Esta organización no deja de ser una importante novedad porque permite tanto al trabajador como a la trabajadora y al alumnado, una formación permanente a lo largo de la vida, con lo que eso supone para la mejora de la calidad del empleo, en general, de la dignificación del puesto de trabajo, y de los logros personales relacionados con la profesión, que impacta en el bienestar social y económico de las personas y en el conjunto de la sociedad, incluido el mercado laboral y el sistema productivo. ¿Qué destacaríamos de esta relación entre los distintos momentos formativos? La flexibilidad del sistema para adaptarse a las necesidades de las personas, la facilidad del tránsito entre las distintas etapas formativas, la posibilidad de completar con éxito una carrera profesional y académica que impacte en un proyecto de vida personal y laboral.
¿Qué mecanismos hay para acreditar las competencias profesionales adquiridas por la experiencia laboral o por vías no formales o informales de aprendizaje?
La Ley Orgánica de Integración de la Formación Profesional (LOIFP) posibilita no solo la acreditación de competencias adquiridas por la experiencia laboral, sino también que el trabajador y la trabajadora puedan seguir progresando en su formación hasta la consecución de un título de FP de Grado Medio y Superior. Esta posibilidad abre la puerta a una formación a lo largo de la vida que tiene todo el sentido del mundo porque mejora la formación de las personas, pero también la calidad del mercado laboral y del sistema productivo.
Tal y como apuntábamos en la respuesta a la primera pregunta de esta entrevista, el reto marcado en la puesta en marcha de la LOIFP, era llegar a acreditar a algo más de dos millones de trabajadoras y trabajadores, con una larga y consolidada experiencia en el mundo laboral, pero sin ningún documento oficial que les acredite sus competencias. Esta certificación se obtiene demostrando una experiencia laboral de, al menos tres años, o haber desarrollado trabajos de voluntariado en el ámbito de las competencias laborales que se quieran acreditar, también al menos tres años. Tanto en un caso como en otro, se contemplan algunos matices.
Pero, en general creo que la idea queda aquí reflejada. Esta medida es muy importante para las personas que en su día abandonaron los estudios para incorporarse al mundo laboral pues les permitirá mejorar en sus condiciones de trabajo; y a los y las jóvenes a partir de 18 años que abandonaron sus estudios, la posibilidad de pensar de nuevo en formarse con la intención de encontrar un empleo digno. En uno y otro caso, diría que casi lo más importante es tener la oportunidad de seguir formándose a lo largo de la vida.
Esta posibilidad abre la puerta a una formación a lo largo de la vida que tiene todo el sentido del mundo porque mejora la formación de las personas, pero también la calidad del mercado laboral y del sistema productivo
¿Qué posibilidades de movilidad nacional e internacional tienen los estudiantes y titulados de Formación Profesional de grado superior?
La movilidad nacional está garantizada por el marco legal de la LOIFP y la estructura de nuestro sistema educativo que define las competencias nacionales y territoriales, es decir de las Comunidades Autónomas (CCAA) también en FP. Desde luego, no soy de la opinión de que existen 17 sistemas educativos, sino de que dentro de las competencias y autonomía que tienen las CCAA existe maneras distintas de interpretar la política educativa, incluyo a la FP, y esto va en función del partido político que gobierna en cada momento y de las ideas políticas en las que sustenta su programa de gobierno autonómico o local. Sí que creo que la Conferencia Sectorial de Educación, que reúne al Ministerio con las Consejerías de Educación, debería tener un papel más determinante a la hora de elaborar políticas que afecten al conjunto del país. La movilidad internacional es clave para el alumnado.
El número de estudiantes, por niveles de FP, que se mueven en el marco del programa Erasmus+, aunque ha ido creciendo desde su puesta en marcha, todavía es muy pequeño y también es insuficiente el número de estudiantes que cursan inglés o una segunda lengua en algún programa en el exterior. En realidad, faltan apoyos y oportunidades reales para que la universalidad y diversidad del alumnado, presente en nuestro sistema educativo, pueda participar en movilidades como parte de su proceso educativo y no sea excluido por motivos económicos, de procedencia o de cualquier otra índole.
La FP dual, también abre el camino a la movilidad en el ámbito internacional y de interacción con el ámbito empresarial que tenemos que seguir mejorando.
faltan apoyos y oportunidades reales para que la universalidad y diversidad del alumnado, presente en nuestro sistema educativo, pueda participar en movilidades como parte de su proceso educativo y no sea excluido por motivos económicos, de procedencia o de cualquier otra índole
¿Cuáles son los elementos que deben propiciar la internacionalización? Entre otros, facilitar proyectos de cooperación con otros centros en otros países; ofrecer tiempo para participar en proyectos de investigación conjunta, multidisciplinares, y no solo del ámbito europeo, sino con terceros países que mejoren la riqueza epistemológica de nuestros planes de estudio; programas de intercambio de profesores y alumnado, de conocimiento de buenas prácticas, experiencias, etc.; reforzar la enseñanza-aprendizaje de otras lenguas en un mundo cada vez más interrelacionado, fortalecer el bilingüismo en la FP con expectativas de facilitar la movilidad internacional, y mejorar las competencias en idiomas del profesorado; apostar por las dobles titulaciones, planes de estudios abiertos para atraer estudiantes de otros países, posibilidad de participar en proyectos de investigación con acreditación para sus titulaciones, etc. Todos estos elementos suponen importantes retos, pero también oportunidades únicas para mejorar y fortalecer nuestro sistema de FP y proyectarlo hacia ámbitos internacionales como la Unión Europea y América Latina, aunque no exclusivamente.
¿Qué opciones de continuidad formativa tienen los titulados de Formación Profesional de grado superior, tanto dentro del sistema de Formación Profesional como en el ámbito universitario?
Por una parte, están los cursos de especialización pensados para complementar y profundizar en las competencias adquiridas. Estos estudios van a posibilitar la ampliación de conocimientos, y perfeccionar las competencias ya adquiridas en un ciclo formativo de FP. Por otra parte, el acceso desde la FP de Grado Superior a la Universidad, que es una realidad, debería estar organizado de una manera más eficaz y flexible de forma tal que el tránsito fuera lo más favorable posible a los intereses del alumnado.
En este sentido, sería muy importante fortalecer nuestro Espacio de Educación Superior, formado -entre otros- por la FP de Grado Superior y la Universidad y “Alinear los planes de estudios de los Grados universitarios y de FPGS afines para configurar carreras profesionales razonablemente escalonadas” como indican los profesores Michavila, Arenas, Jiménez, Carbajo, Martínez y Narejos en el documento “la relación entre la Formación Profesional y la Universidad. Documento de reflexiones y propuestas”, Madrid noviembre de 2020
¿Qué papel juega la innovación, el emprendimiento, la digitalización y la sostenibilidad en la Formación Profesional de Grado Superior?
Estamos hablando de elementos que son fundamentales para construir sociedades más justas, saludables y solidarias, y que muchos de ellos se han convertido en competencias que deben adquirir nuestros niños y niñas, adolescentes y jóvenes a lo largo de todas las etapas del sistema educativo, incluyo a la FP y a la Universidad. Elementos y competencias comunes que tienen como referencia los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS) fundamento de toda la legislación nacional y de las recomendaciones internacionales emanadas de la Unión Europea y de la UNESCO en materia de educación y atención de la Infancia.
El derecho a vivir en un espacio limpio y saludable exige trabajar por un sistema educativo que busque la coherencia y continuidad en todo el proceso educativo, que prepare el paso al mundo laboral de nuestro alumnado también comprometido y preparado para reducir el impacto negativo del ser humano en el planeta.
Capacitar al alumnado, a todo el alumnado, para afrontar la transición digital, exige no solo dotar a los centros con distintos dispositivos y acceso a internet, sino mejorar su capacidad de uso y apertura a metodologías diferentes de las tradicionalmente conocidas, todavía muy generalizadas, con la implicación en proyectos reales de investigación que den coherencia y valor a lo aprendido.
El emprendimiento no surge por sí mismo, tenemos que crear las condiciones para aflorar el talento, enseñar al alumnado a construir el conocimiento y apoyar con becas y dotación económica los potenciales proyectos comunes que surjan del paso por las aulas y acompañamiento en el proceso.
Capacitar al alumnado para afrontar la transición digital, exige no solo dotar a los centros con distintos dispositivos y acceso a internet, sino mejorar su capacidad de uso y apertura a metodologías diferentes de las tradicionalmente conocidas
Innovar exige poner el conocimiento y la investigación al servicio de ese marco global de reducir la pobreza, mejorar nuestra relación con el planeta, cuidando la biodiversidad y nuestra propia supervivencia.
Como he señalado anteriormente, la educación es compleja y no podemos dar soluciones simples. La Formación Profesional y la Formación Profesional de Grado Superior son clave en el Sistema Educativo, son parte de esta complejidad, y como tal participa de esos elementos y competencias, así como de una necesaria educación en valores respetuosa con la diversidad de su alumnado en un marco de Derechos Humanos y de justicia social.
La consideración del alumnado, de los niños y las niñas, los y las adolescentes y jóvenes no pueden ser solo una concepción académica.
La FP educa, no solo forma para incorporarse al mundo laboral y este matiz es clave, la sitúa al mismo nivel de responsabilidad que otras etapas educativas, obligatorias, postobligatoria y postobligatoria universitaria. Forma parte de esa responsabilidad compartida para educar al alumnado, analizar y mejorar la práctica educativa del profesorado y construir esa capacitación para afrontar el reto digital, ecológico y ético de ámbito laboral. Le da sentido como etapa formativa.
¿Qué retos y oportunidades tiene la Formación Profesional de grado superior en el contexto actual y futuro de la sociedad y la economía españolas?
Los retos van de la mano de las oportunidades. Las oportunidades nos sitúan ante la necesidad de superar determinados retos. Como explicó recientemente el profesor Antón Costa, presidente del Consejo Económico Social, “la Formación Profesional se tiene que desarrollar en base a las tres C: corresponsabilidad, cooperación, y confianza”. Implicando al conjunto del sistema educativo que le atañe, el alumnado, las familias, centro educativo y la empresa.
Tres elementos que conforman el modelo formativo. Exigirá una gobernanza nueva. De abajo a arriba: colaborativa, inclusiva e interactiva para afrontar un mundo de incertidumbre. En esta nueva gobernanza es fundamental el papel de los agentes sociales y de las empresas para impulsarla, fortalecerla y expandirla. Este conjunto de ideas, suponen un reto a superar, muy importante y una oportunidad para la sociedad española de progresar hacia una economía más humana, un mercado laboral con más calidad y, a la vez más justo y equitativo, y un sistema productivo más sostenible.
tendremos que fortalecer el Espacio de Educación Superior en el que se integran tanto la Universidad como la FP de Grado Superior, y alinear los planes de estudios para configurar carreras profesionales bien escalonadas, con trayectorias permeables en un espacio común
Todo esto incluye y afecta a la FP de Grado Superior, pero es que además si queremos que esta esté a la altura de los desafíos de la economía y el trabajo del siglo XXI, tendremos que fortalecer, como ya he indicado en varias ocasiones a lo largo de esta entrevista, el Espacio de Educación Superior en el que se integran tanto la Universidad como la Formación Profesional de Grado Superior, y alinear los planes de estudios para configurar carreras profesionales bien escalonadas, con trayectorias permeables en un espacio común compartido, también con la empresa.
Los procesos de alineación de la Formación Profesional de Grado Superior y la Universidad serán fundamentales en la construcción de un sistema educativo que capacite a las personas para afrontar los retos sociales, económicos y culturales de unas sociedades caracterizadas por el cambio, llenas de incertidumbre ante el impacto tecnológico, medioambiental y ético que no deja de advertirnos.
